17 Sep [Cómo saber si he superado una ruptura] 7 señales de que has pasado página
“Sigo echando de menos a mi pareja aunque hace tiempo que rompimos, ¿es normal?
El otro día revisando la galería del móvil vi una foto que tenía con mi expareja y me dio una punzadita; ¿será que todavía siento algo?
Estoy conociendo a otra persona, pero ¿y si es demasiado pronto?
¿Cómo puedo saber si he superado la ruptura con mi anterior pareja?”.
Estas dudas son habituales entre las personas que atraviesan un duelo por ruptura amorosa.
¿Habré olvidado de verdad a esa persona? ¿O será que la herida se ha cerrado en falso y, en realidad, sigo sintiendo algo por ella?
Pues no hay una única respuesta (cada persona lleva el duelo de una manera distinta).
Pero sí que existen algunas señales que te indican que ya has dejado atrás tu anterior relación.
¿Quieres saber cuáles son?
Entonces sigue leyendo, que te lo cuento. 😉
“¿He superado ya esa ruptura?” Cómo saber si has olvidado a tu expareja
Antes de nada quiero darte un consejo:
No tengas prisa por superar a tu anterior pareja.
Cuando se rompe una relación se pasa muy mal,
A nadie le gusta estar triste ni dolido, y lo único que quieres es dejar de sentirte así cuanto antes.
Pero es que la tristeza y el dolor son parte del proceso de duelo.
Si de verdad quieres olvidar a tu expareja, tienes que permitirte sentir todas esas emociones desagradables (¡es parte de la vida!).
Ahora, ¿cómo puedes saber si tú ya has superado esa etapa de duelo?
¿Cómo sabes que ya has pasado página y estás listo para iniciar una nueva relación? (si de verdad te apetece, claro)
Pues como te decía, hay varias señales.
1. Ya no tienes esos sentimientos desagradables
Si al pensar en tu expareja ya no sientes tristeza, angustia o dolor, es muy probable que ya hayas superado la ruptura.
Ojo: te hablo de que esos sentimientos hayan desaparecido de verdad, ¡no de que los ignores!
Te lo digo porque hay personas que, cuando se sienten mal, intentan ponerles una tapa a esos sentimientos “molestos” y fingir que no están ahí.
Eso no funciona, y tampoco es sano para ti.
Si de verdad has superado el duelo, no tienes que “forzarte” a estar bien.
2. Aceptas que la relación se ha acabado
Cuando acababas de romper con tu pareja, seguro que fantaseabas con que volvíais a estar juntos.
Cada vez que te llegaba un mensaje ibas corriendo a mirarlo, con la esperanza de que fuera tu expareja, que se había arrepentido y quería volver contigo.
Cuando superas la ruptura, estas ideas ya no están. Aceptas que la relación ha terminado y ya no sufres por ello.
3. Vuelves a tener tus propios hobbies
Muchas veces, cuando estamos en una relación, acabamos desarrollando aficiones en común con nuestra pareja.
Y cuando se rompe esa relación, tenemos que buscar otras diferentes.
Al principio quizá no te apetecía (no tenías ganas de hacer nada si no era con esa persona).
Pero con el tiempo acabaste encontrando otras aficiones nuevas por tu cuenta, o recuperaste algunas que habías dejado de lado…
Esta capacidad de disfrutar del ocio por tu cuenta es otra señal de que has completado tu proceso de duelo.
4. Has dejado de pensar continuamente en esa persona
Ya no tienes el impulso de escribirle a tu ex.
No sientes la tentación de revisar sus redes sociales para saber qué está haciendo, cómo le va, si ya ha encontrado a alguien más…
En general, ya no piensas tanto en tu pareja como antes.
Eso no significa que la olvides por completo. Tu expareja fue una persona muy importante en tu vida, ¡claro que es normal acordarte de ella de vez en cuando e incluso mirar sus redes!
Pero ya no es algo constante, y sobre todo, recordarla no te produce dolor.
5. Ya no idealizas a tu expareja
Al principio de una ruptura, es muy común recordar únicamente las partes buenas de esa relación que hemos perdido.
Es como si lleváramos unas gafas que solo nos dejasen ver los momentos bonitos.
Pero a medida que atraviesas el proceso de duelo, esas gafas “se caen”.
Poco a poco empiezas a recordar a tu pareja (y la relación que tenías con ella) tal y como era: con sus cosas buenas y sus cosas malas.
6. Has dejado de sentir rencor
Si vuestra relación fue muy complicada, o si viviste una ruptura turbulenta, es posible que al principio sintieras mucha ira y rencor hacia tu expareja.
Pero a medida que transcurre el tiempo, estos sentimientos se van suavizando.
Es como si, al romper, te hubieras quedado sujetando una piedra muy pesada en las manos. Y poco a poco vas abriendo los dedos, hasta que esa piedra se cae al suelo y ya no te duelen los brazos por agarrarla.
Dejar de sufrir por aquello que te hizo tu expareja también es parte del duelo.
7. Te sientes capaz de iniciar una nueva relación
Al principio de la ruptura, te ves incapaz de estar con nadie que no sea tu expareja.
Pero a medida que avance tu proceso de duelo, eso cambiará.
Poco a poco volverás a abrirte ante la posibilidad de iniciar una nueva relación con alguien, e incluso te entrarán ganas de conocer a otras personas.
Eso sí, ¡ojo con confundir conceptos!
Una cosa es estar abierto a empezar una nueva relación, y otra muy diferente sentir que lo NECESITAS.
Hay personas que van enlazando una relación con la siguiente, sin darse tiempo a procesar su anterior ruptura. En cuanto terminan con una pareja, enseguida buscan a otra que llene ese vacío.
Esta es una señal de dependencia emocional.
Encontrar a una nueva pareja es algo que puede ocurrir o no, pero no debería ser un requisito indispensable para sentirte feliz y completo.
¿Y si todavía no he conseguido olvidar a mi pareja? Cómo saber cuándo necesitas ayuda para pasar página
Como te decía al principio del artículo, el proceso de duelo tras una ruptura es diferente en cada caso.
Puede que hayan pasado meses y aún no consigas olvidar del todo a esa persona, y no tiene por qué ser algo “malo” o fuera de lo normal.
Ahora bien, si:
- Ha pasado ya tiempo pero sigues sintiendo el mismo nivel de tristeza y angustia que al principio.
- El dolor por tu ruptura es tan grande que está afectando a tu vida (te cuesta concentrarte en el trabajo, no duermes bien… incluso hay días que ni te apetece salir de la cama).
En estos casos quizá es que ese proceso de duelo se te ha atascado, y necesitas ayuda para seguir adelante.
Y me refiero a ayuda por parte de un profesional que pueda guiarte para gestionar estos sentimientos y cerrar esta etapa de tu vida.
Por ejemplo, como psicóloga he trabajado con muchos pacientes que estaban en esta situación, y que tenían problemas para cerrar las heridas que les había dejado su anterior relación.
Y puedo hacer lo mismo por ti.
Para descubrir si soy la persona adecuada para ayudarte, lo mejor es que entres aquí y reserves una cita conmigo.
En la primera sesión estudiaremos tu caso, y te explicaré cómo puedo acompañarte en este proceso para superar tu ruptura.
¡Te veo muy pronto!